Mi experiencia en Alemania

Mi experiencia en Alemania

Hasta hace menos de dos meses me encontraba en Alemania, experiencia que fue posible al obtener la beca de intercambio ISAP, por un convenio que existe entre la Universität zu Köln y nuestra facultad. Todavía me parece increíble pensar que obtuve esta beca, que se me presentó esta gran oportunidad por la que no podría estar más agradecida, aunque, siendo sincera, en un principio estuve un poco asustada y fue todo caótico.

Con Juan Manuel, un compañero de la carrera de Letras que también obtuvo la beca, encontramos por suerte un apoyo mutuo a la hora de resolver tramites y cuestiones burocráticas con tan poco tiempo de anticipación, eso fue un verdadero estrés, sumado al hecho de que lo único que podía imaginarme del otro lado del océano eran un montón de generales prusianos recibiéndome al llegar. Pese a la amargura inicial, todo salió muy bien y termine rompiendo con muchos mitos y estereotipos sobre la sociedad y cultura alemana.

Soy estudiante de la licenciatura y el profesorado de Historia, me gustaría dedicarme fundamentalmente a la investigación, en particular sobre tópicos cercanos a América Latina. En cuanto a la Universidad de Colonia me parecía curioso que tuviera un centro y una carrera dedicada a estudios Latinoamericanos. Creo que mi principal motivación para presentarme fue esa, dar cuenta de las perspectivas y los enfoques que allí existen, cuales son las motivaciones de quienes eligen esta carrera. De ese modo pude acercarme a muchísimas personas de lo mas interesante, siempre muy amables y dispuestas a dar una mano en todo.

El conseguir alojamiento fue en principio otro problema, hasta entrar en contacto, una semana antes de viajar, con quien fue mi compañera de piso por los siguientes seis meses y medio. Al no conseguir plaza dentro de la residencia universitaria, terminé viviendo en un “WG” (Wohngemeinschaft), es decir, un piso compartido, experimentando muy de cerca como viven la mayoría de los jóvenes universitarios alemanes, junto con Johannes, Laura y Nicci (o Nicola), personas con las que llegué a ser muy cercana y con quienes aún mantengo mucho contacto.

La recepción de las personas encargadas de nosotrxs en Colonia fue siempre maravillosa, muchxs de ellxs son jóvenes que se encuentran haciendo sus maestrías o terminando el grado, nos brindaron todas las herramientas para ayudarnos cuando tuvimos inquietudes o dificultades. Por otro lado, como Nicci está haciendo la carrera de Estudios Regionales de Latinoamérica (Lateinamerikastudien), también pude recibir mucha ayuda de ella e incluso fuimos compañeras en una asignatura. Pude acercarme a muchísimas personas, en los cursos hice bastantes amigxs, porque como ya mencioné muchas veces, todxs siempre mostraron gran predisposición por darme una mano. También generé vínculos muy agradables con distintxs profesores, quienes siempre estuvieron dispuestxs a ayudarnos.

Dado que yo no sabía alemán cuando llegué, me comuniqué en principio solo en inglés (también en español) y las asignaturas que elegí, salvo por los cursos de alemán, fueron en español, sobre Latinoamérica. Fue difícil decidir qué cursos tomar, hubo otros cursos en ingles que también me atraían mucho, pero por coincidencias horarias me vi obligada a elegir. Lo cierto es que me atrajeron muchísimos seminarios que brindaba la universidad, pero los que mas me interesaban, eran en alemán, por lo que no pude tomarlos.

El modo en que la universidad está organizada es muy diferente, para ser sincera todavía no termino de entender como funcionan sus “módulos”. Los seminarios que dictan son muy específicos, sobre temas muy puntuales, lo cual si marca una gran diferencia con la carrera de historia en la UNT. Tuve la sensación de que en términos de contenidos y de conocimientos sobre ciertos procesos, en nuestra universidad estamos mucho más preparados, sin embargo, allí tuve un acercamiento mas concreto a las herramientas necesarias para poder utilizar todo ese conocimiento, que en todos estos años de carrera en la UNT no los tuve. Esto podría sintetizarse en que aquí en Tucumán se está mas orientado al contenido disciplinar, por el contrario, en Alemania, aunque no se abordan muchísimos temas en profundidad, hay una orientación clara en la apreciación critica de ese conocimiento para poder realizar trabajos y presentaciones orales (modo en que me evaluaron para pasar los cursos), lo cual fue un aporte muy significativo para mí, dado que quiero dedicarme a la investigación.

La universidad también brinda muchísimos cursos de idiomas, por lo que también decidí tomar un curso de portugués, curiosamente con la idea de fortalecer mi escaso alemán, teniendo en cuenta que el curso era dado en alemán para estudiantes alemanes. Esto de hecho si me funcionó, fue de gran ayuda para afinar mi oído en relación con el idioma (con el plus de que aprendí un poco de portugués).

Como podrán ver, me pasé hablando cuatro idiomas durante mi estadía (español, inglés, alemán y portugués), la verdad era muy agotador, los primeros dos meses, al finalizar el día, estaba demasiado agotada, aunque también era divertido cuando mezclaba los idiomas sin darme. Sobre esto, lo que, si puedo aconsejar por mi experiencia, es que creo que si sería bueno poder hacer el intercambio con un conocimiento del alemán. Siento que para mi fue muy provechoso el aprendizaje del idioma estando allí, en solo cuatro meses llegue a un buen nivel de A2 y a poder comunicarme e incluso hacer algunos trámites burocráticos en alemán. Aunque ahora continuo con las clases y hago llamadas telefónicas seguidas con mis amigxs y pareja para hablar en alemán, creo que, si hubiera llegado ya con ese nivel a Alemania, habría podido avanzar muchísimo más. El alemán es un idioma muy curioso, muy lógico, muy creativo, revela mucho sobre sus hablantes, saber un poco sobre él antes de llegar ayuda a adaptarse un poco más.

Creo que lo que mas me sorprendió de la cultura alemana es que no eran “tan alemanes”. Muchas veces mis amigxs y mi pareja trataron de explicarme que Colonia es un poco diferente al resto de Alemania, pero creo que en general tuve esa sensación, de no sentirme tan lejos por muchas cosas: la gente no siempre es puntual, los trenes tienen muchos retrasos (la Deutsche Bahn se volvió una gran enemiga), la burocracia es igual de lenta y complicada, las personas no son frías aunque si es cierto que son muy directas, todxs están dispuestxs a ayudarte y a tratar de entenderte. Podría hacer una lista interminable de similitudes, es cierto que hay muchas diferencias (como las voraces filas de supermercado alemanas o el miedo al contacto en el trasporte público lleno), pero si pienso en lo que mas me impacto, es eso, lo rápido que pude adaptarme y sentirme en casa pese a ciertos choques culturales.

Si pienso en lo más difícil de esta experiencia, creo que fue el volver a Tucumán. No solo lo digo por las dificultades materiales que tuve, vinculado al cierre de fronteras, que inició el mismo día que tomaba mi vuelo, si no porque de verdad me enamoré mucho de Colonia, de la Renania, de sus personas, fue muy difícil irme, aunque también extrañaba muchísimo Tucumán. Recomiendo muchísimo esta experiencia.

Nahla Chaban

Mi experiencia en The Priory School

Mi experiencia en The Priory School

¡Hola a todos! Mi nombre es Henny Martín González y fui becaria en la convocatoria 2014 – 2015 para Asistente de Idioma en la Beca convenio del British Council y el Ministerio de Educación de la Nación Argentina.

Durante los 8 meses que duró mi experiencia trabajé en The Priory School, una escuela secundaria ubicada en un pueblito super pintoresco y tradicional de Inglaterra llamado Hitchin, en Hertfordshire. Trabajaba 12 horas semanales, y había un día de la semana que no asistía a la escuela (no siempre es así, depende la organización de las clases de cada escuela). Mi trabajo consistía en dar apoyo a los alumnos que estudiaban español especialmente en el área de conversación. Con los primeros años del secundario se trabajaba para reforzar vocabulario específico mediante juegos, canciones y videos, y en los últimos años se trabajaba especialmente la parte de Speaking para rendir examenes internacionales. Además de esto, siempre fui una embajadora de la cultura argentina mostrándoles a los chicos aspectos que nos identifican como costumbres, videos sobre las diferentes regiones y paisajes de argentina, la música, el “mate”, y tantas otras cosas… Los alumnos allá son super respetuosos y “curiosos”, siempre sorprendiéndose y haciendo preguntas para aprender más. Tengo los mejores recuerdos con ellos y con mis colegas del colegio.

En lo que a capacitaciones respecta, antes de volar al Reino Unido se realizan reuniones en Buenos Aires y una vez en el país que te toca se asiste a una “Foreign Language Assistant two days induction” en la que te brindan tips y herramientas para desempeñarte de la mejor manera posible en la tarea asignada. Estos encuentros sirvieron además para conocer otros/as asistentes de español de otros lugares cercanos.

Más allá de la experiencia en el colegio, lo mejor que me dejó está beca fueron los amigos que me hice y las vivencias interculturales que compartimos juntos. En mi caso vivía con 3 chicas francesas de las cuales una era además colega ya que ella era Asistente de Francés en la misma escuela que yo. Conformamos un hermoso grupo con unos vecinos (2 españoles, otra francesa, un italiano y un alemán) que hicieron que todos los momentos sean inolvidables, desde cenas, idas al gimnasio, a pubs, al cine, y muchos más. Aprovechábamos los fines de semana para ir a pasear a Londres (¡Estaba a solo 40 minutos en tren!) o a otras ciudades como Oxford, Cambridge o Brighton, y los fines de semana largos o vacaciones para viajar a países como Escocia, Alemania, Suecia y tuvimos la suerte de disfrutar juntos el “festival de San Patricio” en Dublín, Irlanda. Hasta el día de hoy seguimos en contacto por nuestro grupo de whatsapp y muchas veces se hace difícil contener las lágrimas al recordar con nostalgia todos los hermosos momentos vividos que quedarán en mi corazón para siempre.

No tengo dudas al afirmar que esta fue LA MEJOR EXPERIENCIA DE MI VIDA, por eso les recomiendo a todos que se animen, se presenten y lo intenten. Es una oportunidad única que los ayudará a crecer no solo profesionalmente, sino también a nivel personal y dejará una marca para toda la vida en cada uno de ustedes.

Mi experiencia de Intercambio en UNICAMP

Mi experiencia de Intercambio en UNICAMP.

Mi primer intercambio como estudiante fue durante el segundo semestre del año pasado (2019), en la Universidade Estadual de Campinas (UNICAMP) en São Paulo, Brasil. Llegué a esta universidad por medio de la beca ESCALA organizada por la Asociación de Universidades del Grupo Montevideo (AUGM).

No conocía esta beca hasta que se abrieron las inscripciones. Tuve que presentar mi CV y una carta de motivación para postular. Cuando me dijeron que había ganado la beca, empezó otra serie de papeles y certificados para presentar (trámites a veces engorrosos) pero que no podían con la emoción de pensar que iba a estudiar por un semestre en un universidad extranjera latinoamericana.

Antes de ir a la Universidad en Campinas, ya tenía decidido dónde iba a vivir gracias a la ayuda de una estudiante salteña que en ese momento estaba terminando su intercambio en Brasil, sus consejos me ayudaron muchísimo!. Las opciones eran vivir sola en una especie de monoambiente (Kitnet), en casas comunitarias y administradas por los estudiantes que viven allí (república, lo más común) o en casas también compartidas pero administradas por el/la dueño/a de casa (pensionato). Yo viví en un pensionato junto con otros 15 estudiantes de grado, posgrado y doctorado. Todos teníamos más o menos la misma edad y éramos de Argentina, Colombia, México, Perú y Brasil. 15 personas viviendo en el lugar que me acostumbré a llamar “mi casa”. Estaba ubicada sólo a 10 minutos caminando de la Universidad, por lo que prácticamente no usaba el servicio de transporte que la misma ofrece.

Soy estudiante de Letras y en UNICAMP cursé tres materias del IEL (Instituto de Estudos da Linguagem) y una en el CEL (Centro de Ensino de Línguas). Cursé Políticas Linguísticas, Neurolinguística, Tópicos Especiais em Literatura Brasileira: Regiões III y Português para Estrangeiros. La adaptación al ritmo de clases y a la vida universitaria fue bastante rápida y cómoda, a las pocas semanas sentí como si estuviese en mi universidad de origen! Los profesores que tuve estuvieron siempre dispuestos a ayudarme con lo que necesite, sus clases eran claras y la propuesta de enseñanza-aprendizaje gustó mucho. Disfrutaba de cada clase. Hasta el día de hoy sigo en contacto con algunos de ellos. Las dinámicas dentro del aula eran parecidas a las que ya estaba acostumbrada, y al usar lenguaje técnico de cada materia, fue fácil seguir las clases sin manejar aún el idioma con fluidez.

Pude armar de a poco mi propia rutina entre los horarios de clase, la vida en la Universidad, deporte y salidas con amigos! La oferta de actividades extracurriculares en UNICAMP es muy amplia, desde eventos deportivos, artísticos, encuentros culturales y tantas otras cosas diferentes a las que estaba acostumbrada en mi Universidad, me anoté para hacer un poco de todo!

Pasábamos mucho tiempo dentro de la Universidad, ya sea en clases, entre clases o haciendo tiempo para llegar temprano al querido “bandejão” o “bandeco”, el comedor universitario principal. El desayuno, el almuerzo y la cena eran en horarios a los que no estaba acostumbrada (la cena, por ejemplo, era desde las 17 hasta las 19.45) pero como toda mi rutina empezó a girar en torno a UNICAMP y sus horarios, no fue difícil adaptarse. Además, era entretenido adivinar cuál menú brasileño tocaba cada día! Platos y combinaciones que nunca me hubiese imaginado. Aprendimos mucho de la cultura de Brasil también desde su gastronomía. Además, era el momento de buscar en la inmensidad del comedor a tu grupo de amigos, sentarte y compartir con ellos cómo iba tu día, que era lo que faltaba y arreglar a qué hora nos veíamos esa noche en “El Posto”, bar universitario en Barão Geraldo.

UNICAMP tiene un grupo especial de voluntarios que se encargan de ayudar a los intercambistas en la adaptación y en el transcurso del semestre, cuando yo estuve allá el grupo se llamaba “Uniinter”, actualmente es “Uniin”. La existencia y ayuda de Uniin fue fundamental para el proceso de adaptación. Desde el momento en que fui aceptada en UNICAMP, me acompañaron con mails informativos, ayuda, consejos sobre los papeles que necesitaba llevar, los que necesitaba traer de vuelta, generaron un grupo de Whatsapp con el resto de los Intercambistas, me sentí bienvenida en UNICAMP sin siquiera haber llegado allí…

Tuvimos gracias a ellos nuestra “semana de adaptación”, donde nos mostraron la Universidad, la vida fuera de ella, programaron actividades para conocernos entre todos los intercambistas, etc.

Desde el primer día hicimos amistades entre todos, se percibía la buena onda y predisposición para charlar y conocerse. La realidad es que todos, de un día para el otro, estábamos fuera de nuestra zona de confort en un país extranjero, entonces la sensación al comienzo era la de ser amigos, sólo que todavía no nos habíamos conocido...

En cuanto al idioma, si bien teníamos clases de portugués, la mayoría del vocabulario y las palabras para expresarme en mi día a día las aprendí con amigos, al conocer la vida de cada uno, y con ganas de aprender cada vez más. El primer mes fue el más difícil para comunicarse en portugués tanto con nativos como con el resto de los intercambistas, pero entre mímicas, interpretaciones y traducciones logramos relacionarnos. Nos conocíamos cada vez más entre todos, nuestros horarios, nuestros gustos, lo que indefectiblemente llevó a que también se formen grupos más pequeños , era muy difícil hacer actividades para grupos tan grandes. De igual manera éramos bastantes, por lo que siempre había disponibilidad y ganas para ir a un bar, hacer un “churrasco” o ir a casa a ver películas.

Luego del cursado de las materias y el fin del ciclo lectivo, decidimos viajar a fin de año por otras partes de Brasil para conocer lo más que podamos. Armamos un viaje con mi grupo de amigos de todo el semestre, éramos unas 15 personas de más de 7 nacionalidades en Brasil dispuestos a aprovecharlo al máximo. Vimos y vivimos en el Nordeste Brasileño otra cara de ese país, otras personas y rutinas diferentes a las vistas en São Paulo. Todo nuestro semestre académico sumado a esta instancia de viaje nos abrió la cabeza y nos mostró mucho de lo que desconocíamos sobre Brasil y sobre nosotros. Un viaje con amigos inolvidable. Las personas y los lugares fueron uno mejor que el otro, conocimos otras culturas y maneras de ver el mundo (no sólo de Brasil, sino también de mis amigos).

Ya próximos a las despedidas y vueltas a nuestros países de origen, entre llantos de alegría y tristeza, todos hablamos de lo difícil que es transmitir una experiencia de intercambio al resto. Era como si tuviésemos que contar un dia de nuestra vida cotidiana con lujo de detalle a alguien ajeno a esa cotidianeidad, con detalles que incluso no contemplamos ya que para nosotros eran “normales” (donde vivíamos, dónde y qué comíamos, dónde quedaba UNICAMP, etc). Creo que no poder traducir en palabras exactas la totalidad de mi intercambio es positivo, envuelve tanto a nivel académico, personal, social… Quedamos de acuerdo (entre brasileños e intercambistas) que al finalizar un intercambio la persona que lo experimentó no vuelve a su país, sino que llega de nuevo. Las experiencias vividas (desde las más banales hasta las más complejas) tienen un impacto en nosotros, nos permiten desafiarnos y colocarnos fuera de nuestra zona de confort. Tantas personas que hace unos meses no conocía son hoy una parte fundamental de mi día a día. Tantas historias y vidas que casualmente tienen la oportunidad de cruzarse por unos meses y conocerse.

Después de haberlo vivido, recomiendo hoy y siempre vivir una experiencia de intercambio. Ahora, entre intentar enumerar las razones específicas por las cuales es recomendable o, decir que, aún después de meses, no consigo poner en palabras tantas emociones y experiencias, no puedo dejar de reírme o de llora con anécdotas, no puedo creer lo mucho que disfruté… Prefiero simplemente recomendar siempre que lo hagan, que asuman la aventura del intercambio como un desafío porque estoy segura que va a superar todas las expectativas que desde nuestros lugares podemos generar. Porque seguramente a la vuelta traés mucho más de lo que creés, mucho más que una valija, cuando llegues de nuevo.

Lucía María Terán

MI EXPERIENCIA EN UNIVERSITY OF NORTHERN COLORADO Beca TEA Fulbright

MI EXPERIENCIA EN UNIVERSITY OF NORTHERN COLORADO Beca TEA Fulbright

Mi nombre es Noelia Mazza, tengo 32 años y soy profesora en Inglés, egresada de esta hermosa casa de estudios.

Después de una convocatoria que constaba de diversos pasos, en el año 2018 fui seleccionada para ser parte de la cohorte 2019 formada por tres profesores de diferentes lugares de Argentina.

La beca Fulbright TEA (Teaching Excellence and Achievement) está destinada a profesores de inglés dedicados a la enseñanza en el nivel secundario. La misma ofrece una capacitación de seis semanas en una universidad estadounidense.

En mi caso en particular, fui seleccionada para asistir a University of Northern Colorado en Greeley, una ciudad ubicada a más o menos una hora de Denver, capital del estado.

Fui parte de un grupo de veintiuno profesores de inglés de veinte países diferentes. Nos alejamos en los departamentos para estudiantes ubicados en el campus de la universidad. Particularmente me tocó compartir mi residencia con dos colegas de Tailandia y Uzbekistán. ¡Una experiencia cultural y de aprendizaje maravillosa!

En la universidad cursamos cuatro materias: Metodología, Enseñanza de Inglés como Lengua Extranjera, Educación Especial y Tecnología para la Educación. Teníamos clases de lunes a viernes por la mañana y tarde, excepto los días martes que asistíamos a una escuela secundaria local. Allí, nos designaron un co-teacher con quien realizamos observaciones de clase, colaboramos con los docentes en sus actividades y muchas veces también fuimos embajadores de la cultura argentina compartiendo tradiciones, costumbres, música, paisajes y diversos aspectos que caracterizan nuestra identidad.

Este programa también ofrece la posibilidad de tener “family friends”, una familia local que te acompaña y con la cual puedes compartir actividades sociales y de recreación. De hecho, este es uno de los aspectos más lindos ya que permite establecer relaciones que muchas veces perduran años después del programa.

Más allá de la valiosa formación académica que me dejó esta beca, quiero destacar la increíble y enriquecedora experiencia cultural que ofrece. En este programa compartimos viajes, cumpleaños, y miles de experiencias inolvidables, aprendimos sobre diferentes culturas y la vida de personas de todos los continentes, e incluso forjamos vínculos que aún hoy, a la distancia, nos mantienen unidos y trabajando en lo que amamos, que es la enseñanza de inglés.

Desde lo más profundo de mi corazón, puedo decir que fue una de las mejores experiencias de mi vida. Les recomiendo ampliamente aplicar para este programa ya que es una excelente oportunidad no sólo para desarrollarse profesionalmente sino también estrechar lazos con personas y culturas de diferentes lugares del planeta.

Mi experiencia de intercambio en Köln – Alemania

Mi experiencia de intercambio en Köln – Alemania

Cuando a fines de agosto me bajaba del tren que iba desde Frankfurt a Köln tuve mis primeras emociones fuertes, porque fue el momento en el que me di cuenta de lo que estaba empezando a vivir. Tener que hablar un idioma que hasta hace un año atrás me era completamente ajeno fue una experiencia que me transformó enormemente, siempre para bien.

Me tocó llegar a Alemania con la beca de intercambio ISAP, por convenio entre la Universität zu Köln y la Facultad de Filosofía y Letras UNT. Soy estudiante de la Licenciatura y el Profesorado en Letras, y en mi carta de motivación (uno de los requisitos para la postulación, junto con otros papeles como certificaciones y currículum) ya contaba que me interesaban las lenguas y que me gustaría en un futuro poder enseñar español a otras personas, y en este viaje supe que en ese contacto lingüístico entre dos personas diferentes ambas aprenden otro modo de entender el mundo.

Me tocó vivir cinco meses en una casa de familia, donde compartía el piso superior con una compañera que venía desde Suiza. Durante todo el semestre intercalé el idioma inglés con el alemán debido a la complejidad de algunas situaciones, siendo inglés una lengua que me era mucho más conocida. Pero cuando al poco tiempo tuve que interactuar con personas que solamente hablaban alemán, tuve que aplicarlo aún más y fui ganando confianza, y con eso mucha autoestima, debo decirlo, porque era muy lindo sentir que podía manejarme bien con esa lengua a la que antes le sentía un poco de miedo al empezar. Por eso recomiendo a mis amigos y amigas que siempre estudien nuevos idiomas, y más aún alemán, porque abre puertas a nuevas perspectivas y vivencias que me alegro de haber tenido.

La llegada a la Universidad fue otro ‘Kulturschock’ (una palabra muy utilizada allí para hablar de esa sensación al experimentar algo totalmente nuevo en otra cultura). Pudimos acceder a una enorme diversidad de cursos y seminarios. Con Nahla, de la carrera de Historia, junto a María y Nicolás, quienes estudian Comunicación en la UNSTA, debimos asistir a clases en inglés, español y alemán, por lo que el contacto con diferentes lenguas fue una constante en nuestra cotidianeidad durante todo el semestre. Pudimos percibir la enorme diferencia y el gran aporte de estudiar una lengua en su lugar de origen. Teníamos conocimientos de gramática y vocabulario, pero fue el hecho de conversar con personas, interactuar con nuevos amigos lo que nos ayudó a afianzar y acrecentar nuestro manejo del idioma. Además, pudimos conocer a personas de todo el mundo, hacer amigos de muchísimas latitudes diferentes que nos contaban sobre su vida y sus culturas.

En lo particular, luego de aprobar el curso de idioma alemán B1 opté por los seminarios y lecturas: Literature of New York, American Modernism, Was ist Lyrik?, Romanische Sprachgeschichte, Modern and Contemporary American Poetry and Theory, Coherencia y Estructura del Discurso, Prácticas disidentes de teatro y cine en Hispanoamérica. El modo de los estudios universitarios es muy distinto al que estamos habituados, por lo que implicó adaptarnos a nuevos ritmos y a distintos hábitos de estudio. El intercambio me benefició mucho en el sentido de que me aportó nuevas herramientas para el conocimiento de la lengua y la literatura, y contamos con docentes que acompañaron nuestro proceso de manera constante.

La cultura alemana en general nos sorprendió, derribando algunos mitos construidos alrededor de su idiosincrasia. La sorpresa fue en un sentido positivo, y en algunos aspectos sentíamos que ese modo de vivir había calado muy hondo en nosotros, al punto que nos alegraban o indignaban las mismas cosas que a nuestros amigos y las personas con las que convivíamos. Llegué a sentir a Köln como un hogar, y empecé a sentir la nostalgia de dejarlo de a poco cuando en febrero me mudé a Düsseldorf, una ciudad cercana, durante el tiempo en que ya no debía asistir a clase, sino dedicarme a terminar de escribir los trabajos finales para las materias y seguir conociendo el país. Mis días favoritos era cuando paseábamos por el casco viejo de la ciudad, comíamos un Bratwurst (comida típica) y bebíamos la cerveza de la ciudad, la Kölsch. Es una ciudad muy festiva que cuenta con uno de los carnavales más conocidos (al punto de que las estaciones del año se conocen allí como primavera-verano-otoño-Karneval).

Me preguntan si recomiendo este intercambio. Respondo con Me preguntan si recomiendo este intercambio. Respondo con “Home es wo der Dom es”, la canción que suena durante el carnaval de Köln en el dialecto de la región, haciendo referencia a su icónica catedral, que puede verse desde muy lejos. Caminar bordeando el río Rin con personas a las que llegué a querer mucho se volvió uno de mis recuerdos favoritos, por lo que me identifico con esa canción y puedo llamarla mi segundo hogar, y el lugar al que siempre voy a querer volver.

Juan Manuel Romero

Pronunciamiento Día Nacional de la Memoria por la verdad y la justicia. 2021

HONRAR LA MEMORIA, CONSTRUIR LA VERDAD, EXIGIR JUSTICIA

Desde la Facultad de Filosofía y Letras de la UNT ratificamos, como cada año, el compromiso con la Memoria, la Verdad y la Justicia. Al cumplirse 45 años del último golpe de estado cívico militar, convocamos a la comunidad de nuestra institución a participar de las actividades previstas en homenaje a los/as 30.000 detenidos desaparecidos/as.

En Tucumán, el terrorismo de Estado se implantó desde el Operativo Independencia, y la provincia fue escenario de ensayos e implementación de las peores prácticas sistemáticas de disciplinamiento y aniquilación.

Como Facultad que produce conocimiento desde las humanidades, nos involucramos en la docencia, la investigación y la extensión con la construcción de políticas públicas de memoria, de fortalecimiento de la Democracia y del inclaudicable reclamo de justicia.

Hoy la plantación de árboles nativos nos permite realizar una intervención simbólica que expresa el valor de la vida, de la siembra de conciencia sobre el valor de los derechos humanos. Por ello somos parte de la iniciativa Plantamos memoria.

Invitamos a la comunidad de Filo a volver a visitar las series audiovisuales realizadas por LUPA, productora de nuestra facultad, en homenaje a estudiantes desaparecidos/as y docentes cesanteados durante la última dictadura.

 
LINK:

Mes de la Memoria. Plantamos memoria

Mes de la Memoria por la Verdad y la Justicia

A 45 años del Golpe Cívico Militar

26 de marzo 9.30 Hs

Filosofía y Letras participa de la convocatoria “Plantamos Memoria”, Los Organismos de DDHH nos invitan a plantar 30.000 árboles en todo el país como acto de memoria y futuro.

 

Organiza:
H.I.J.OS Tucumán y Facultad de Filosofía y Letras

 

 

Mes de la Memoria. Poesía y Memoria

Mes de la Memoria por la Verdad y la Justicia

A 45 años del Golpe Cívico Militar

Poesía y Memoria

Jueves 25 de marzo - 19:00

Zoom: ID de reunión 817 2082 5003

Código de acceso: 863416

Conferencia

"Una lengua culpable", a cargo de Jorge Monteleone (UBA-CONICET)

Lecturas:

de Francisco Urondo, por Guillermo Saavedra

Liliana Lukin (poemas)

Participan:

Diego Reynaga Sosa | Agustina Ganami | Juan Vaquera | Fabio Wasserman

Poemas

de Miguel Ángel Bustos, Juan E. González, Glauce Baldovin.

Coordina: Dr. Guillermo Siles

Organiza:
Secretaría de Extensión y Espacio Cultural de Filosofía y Letras

 

Acto de Colación Virtual

La Señora Decana de la Facultad de Filosofía y Letras, Dra. Mercedes Leal, invita a Ud. muy especialmente al Acto de Colación Virtual de grado y posgrado de las distintas carreras de esta Facultad.

El acto se transmitirá en vivo el jueves 25 de marzo a las 10.30 Hs. del corriente año por los canales de Facebook e Instagram de la Facultad

LINKS COLACIÓN:

Facebook: https://www.facebook.com/filount

Instagram: https://www.instagram.com/filoyletrasunt/

Youtube: https://www.youtube.com/watch?v=NA-C7TOZHaE

Protocolo interno de juramento por modalidad virtual