¡Hola! Me llamo María Gracia Ceballos Paz, tengo 22 años, soy estudiante del Profesorado y Licenciatura en Inglés de la UNT. Ahora estoy en Francia como Asistente de Español, y vengo a compartir mi experiencia.
Conocí la beca casi por casualidad, estudié francés durante la secundaria y después de rendir el final de francés 2 en la facultad, me acuerdo que la profesora me alentaba a seguir estudiando el idioma. Así decidí inscribirme en la Alianza Francesa, donde me contaron sobre la beca. Para poder presentarme tenía que cumplir ciertos requisitos, como tener el 50% de la carrera completa, ser alumna regular, tener un nivel de francés B1, presentar una carta de motivación, entre otros. Lo bueno es que es una beca abierta para estudiantes de todas las carreras, no solamente para los del Profesorado de Francés, y eso me motivó, porque cualquiera podía postularse.
Yo me postulé a fines de 2019 y fui seleccionada junto con estudiantes de todo el país en abril del 2020, pero debido a la pandemia, la embajada de Francia nos dio la opción de hacer el programa en el 2021, eso sí, tuvimos que presentar todos los documentos y formularios otra vez. Así que después de miles de trámites (que se hacían cada vez más largos y tediosos por la pandemia), llegué a Francia a mediados de septiembre de 2021 para empezar a vivir esta experiencia única.
En mi caso, fui elegida para trabajar en la Académie de Lyon, y estoy viviendo en una ciudad que se llama Saint-Étienne. Mi contrato empezó el 1 de octubre y termina a fines de abril. A mí me tocó trabajar en un lycée (serían los 3 últimos años de la secundaria), trabajo con varios cursos, a veces doy clases con las profesoras de español y otras veces estoy yo sola con la mitad de los alumnos o grupos pequeños. El trabajo a mí me encanta, es muy lindo porque si bien hay veces que preparo temas generales que me piden las profesoras, muchas otras me piden que arme clases sobre Argentina, para compartir nuestra cultura. Por ejemplo, di clases sobre el mate, Mafalda, los gauchos, lugares turísticos de Argentina, y temas del estilo. También es muy lindo porque los alumnos son muy curiosos y todo lo que les muestro o les cuento le llama la atención, sobre todo nuestro acento ya que están acostumbrados al español de España.
Acá pude hacerme amiga de gente local y también conocí a asistentes de todos los países, de Estados Unidos, Inglaterra, Austria, Italia, España, de la India y hasta de Rusia. Juntos estamos compartiendo esta experiencia y formamos una amistad super linda. Hacemos comidas entre todos donde cada uno lleva un plato típico de su país, celebramos cumpleaños e incluso algunas fiestas (como Thanksgiving y hasta hicimos una tradición del año nuevo de Rusia) Es muy lindo poder conocer otras culturas y también compartir la mía.
Mucho antes del principio de esta aventura, con los demás chicos argentinos, cada uno desde su provincia en una videollamada de Meet, hablábamos sobre un sueño que nos unía: encontrarnos en París para Año Nuevo y poder compartirlo todos juntos. Me alegra mucho decir que lo logramos, nos encontramos ahí y pudimos despedir el 2021 en los Jardines de Luxemburgo y recibir el 2022 en Notre Dame y hacer un picnic en la Torre Eiffel el 1 de enero.
Recién en enero y a la mitad del período de la beca, no me alcanzan las palabras para decir lo contenta que estoy de estar acá, de estar viviendo esta experiencia inolvidable y no puedo esperar para ver qué traen los meses que vienen.
Para terminar, si hay algo que quiero decir, es que siempre hay que animarse a postularse, no bajar los brazos y a luchar por eso si de verdad se lo quiere. Cuando me dijeron que había quedado seleccionada, en plena fase 1 de la cuarentena, cuando el mundo recién se enteraba del COVID, y luego que tenía que esperar al año siguiente para poder viajar y buscar y presentar todos los documentos de nuevo, veía toda la experiencia muy lejos y a veces hasta inalcanzable. Sin embargo, paso a paso, y con perseverancia, todo se fue resolviendo y hoy estoy en Saint-Étienne viviendo esta experiencia única que no solo me enriquece profesionalmente, sino también en lo personal.