El 29 de mayo, en el Espacio Cultural, se llevó a cabo la I Jornada: “Arte y DDHH: Verdad Memoria Resistencia”. En esta oportunidad, el encuentro rindió homenaje a la luchadora de Ledesma, OLGA AREDEZ.
La actividad, organizada por la Cátedra Libre de Derechos Humanos de la Facultad, se fundamenta en el hecho de que el arte significa o alude a la realidad, en la más alta expresión simbólica. Por eso, la cátedra decide incluirlo en el universo de los DDHH. Y afirma: “el arte ha sabido amalgamar el sentir popular llamando la atención sobre las arbitrariedades del poder, hablándonos de la solidaridad y la cohesión social en torno a ideales compartidos. El arte no tiene un discurso autónomo, es la herramienta más eficaz para poner de relieve los sentidos y el valor de la vida, postergados por la creciente indiferencia que impulsa el neoliberalismo. Un sistema que pretende instalar un mutacionismo atroz que arrasa con la memoria. El arte en todas sus expresiones está intrínsecamente vinculado a cualquier actividad académica, comunitaria, institucional, aunque la perspectiva de claustro intente escindirlo y fragmentarlo. Sirva lo expresado de fundamento para plantear estas jornadas, que se desarrollarán en varios momentos del año académico, convocando a diferentes expresiones artísticas provengan éstas del espacio popular como del académico, intentando ofrecer una estrategia instituyente integrada para pensar y actuar.”
La Coordinación de la jornada estuvo a cargo de Mirtha Livak, Marta Valoy y Andrea Montenegro Scarpa y se desarrolló en cuatro momentos: una mesa panel con lectura del Poema sobre Olga Aredez por su autora Marta Valoy; testimonios por parte de su hija y su nieta y lectura del poema Sol de noche por su autor Dardo Solórzano; luego se proyectó la película documental “Sol de Noche”; y, para concluir, se generó el debate sobre la misma y Adrián Sosa interpretó la canción “Sol de noche”.
Breve reseña de la homenajeada
Olga del Valle Márquez de Aredez (1933-2005) fue una Madre de Plaza de Mayo de Jujuy, esposa de Luis Ramón Aredez, médico pediatra desaparecido el 13 de mayo de 1977; intendente de Libertador Gral. San Martín entre junio de 1973 y enero de 1974; secuestrado y detenido en el centro clandestino “El Guerrero” el 24 de marzo de 1976; días después legalizado y trasladado a la cárcel de Villa Gorriti, Jujuy, y luego a la Unidad 9 de La Plata, liberado en marzo de 1977 y secuestrado nuevamente y desaparecido en 1977.
Olga Aredez fue reconocida por su importante trayectoria en la lucha por los derechos humanos y sobre todo por su persistente denuncia los hechos conocidos como la “Noche del Apagón”, en los que en julio de 1976 la dictadura -con la complicidad de la empresa ingenio Ledesma- efectuó una serie de cortes en el suministro eléctrico con el objetivo de realizar secuestros y ejercer el terror en la población de Libertador General San Martín y Calilegua. En esos operativos fueron secuestradas alrededor de cuatrocientas personas, muchas de las cuales aún permanecen desaparecidas.